Hassir Tar Hussain...asesino islámico
Asqueroso asesino. Si, es una buena definición para ti. Un asesino a sueldo de una religión fanática que invita a sus fieles a quitarse la vida matando inocentes.
Me cago en ese dios mil millones de veces. Ese es un dios asesino y cruel. Miento, no es un dios, es un puñetero diablo capaz de encandilar mentes calenturientas y vacías. Como la tuya, Hasib Tar Hussain que a tus solo 18 años decidiste que si París bien valía una misa, las putas huríes que te prometía el librito ese, bien valían unas cuantas muertes de gente inocente a la que nunca habías visto la cara.
Y a la que nunca se la verías. Porque te convertiste en una bomba diabólica buscando el puto paraíso yihhadiano. Ese paraíso que no existe.
Llenito de huríes siempre vírgenes que esperan a los valientes que han muerto en nombre de un quíteme Allah esas pajas. Amos vete, Manolete, ni harto de tu hasshis te lo crees.
Imbécil, ¿hay huríes o hay dolor, fuego y condenación eternas?. Desde luego aquí, por lo único que se te va a recordar, y eso durante un solo ciclo de noticias, es por tu cobardía y por como has pagado al país que te acogió.
Eres (eras, gracias a Dios) un pobre desgraciado incapaz de comunicarse con muchachos de tu edad. Un pobrecillo, vamos. Un ser asocial incapaz de acercarte a la raza humana. Estabas en un estadio inferior de la evolución.
Y tu madre, tu padre y tus hermanitos pequeños han quedado marcados para los restos como la familia del asesino. No como el que alcanzó la gloria eterna de Allah y sus jodias huries (que deben estar hasta el chichi del overbooking que hay últimamente con tanto loco explosivo suelto).
Solo te recordaremos como un ser asqueroso, deleznable, abyecto, odioso ante los ojos de cualquier dios que exhiba tal nombre en su tarjeta de visita. Solo eso, mamón, un asesino a sueldo de los más bajos instintos.
Y con un cerebro de mosquito porque¿ quién coño en pleno siglo XXI se cree que si uno muere por Mahomita o por la madre que lo parió va a tener barra libre en el Puti Club Las Huríes Calentitas?
Vamos que, además de asesino eres un gilipollas. Como todos tus hermanos. Púdrete en el infierno, hijo puta.
Me cago en ese dios mil millones de veces. Ese es un dios asesino y cruel. Miento, no es un dios, es un puñetero diablo capaz de encandilar mentes calenturientas y vacías. Como la tuya, Hasib Tar Hussain que a tus solo 18 años decidiste que si París bien valía una misa, las putas huríes que te prometía el librito ese, bien valían unas cuantas muertes de gente inocente a la que nunca habías visto la cara.
Y a la que nunca se la verías. Porque te convertiste en una bomba diabólica buscando el puto paraíso yihhadiano. Ese paraíso que no existe.
Llenito de huríes siempre vírgenes que esperan a los valientes que han muerto en nombre de un quíteme Allah esas pajas. Amos vete, Manolete, ni harto de tu hasshis te lo crees.
Imbécil, ¿hay huríes o hay dolor, fuego y condenación eternas?. Desde luego aquí, por lo único que se te va a recordar, y eso durante un solo ciclo de noticias, es por tu cobardía y por como has pagado al país que te acogió.
Eres (eras, gracias a Dios) un pobre desgraciado incapaz de comunicarse con muchachos de tu edad. Un pobrecillo, vamos. Un ser asocial incapaz de acercarte a la raza humana. Estabas en un estadio inferior de la evolución.
Y tu madre, tu padre y tus hermanitos pequeños han quedado marcados para los restos como la familia del asesino. No como el que alcanzó la gloria eterna de Allah y sus jodias huries (que deben estar hasta el chichi del overbooking que hay últimamente con tanto loco explosivo suelto).
Solo te recordaremos como un ser asqueroso, deleznable, abyecto, odioso ante los ojos de cualquier dios que exhiba tal nombre en su tarjeta de visita. Solo eso, mamón, un asesino a sueldo de los más bajos instintos.
Y con un cerebro de mosquito porque¿ quién coño en pleno siglo XXI se cree que si uno muere por Mahomita o por la madre que lo parió va a tener barra libre en el Puti Club Las Huríes Calentitas?
Vamos que, además de asesino eres un gilipollas. Como todos tus hermanos. Púdrete en el infierno, hijo puta.
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